FILOSOFIA

Voy oyendo desde hace tiempo entre socios con antiguedad en su carné que quieren ver espectáculo en San Mamés, que quieren que Athletic gane y que quieren que los niños vean triunfos que se celebren en la vieja gabarra. Y estos socios encuentran en los extranjeros la solución mágica a los males de Athletic.
Soy de los que cree que debemos aguantar, y digo aguantar por ser realistas, todo lo que podamos con nuestra filosofía actual. Nadie sobra en el Athletic pero el que quiera extranjeros que ponga la tele y vea los otros partidos de la liga.
Lanzo otra propuesta, tantas planchas se presentan a cada convocatoria a la presidencia del Club, tantas ideas, fuerzas y tanto dinero que queda sin uso, dado que sólo uno puede ganar... porque no dedicamos esas energías a promover otro equipo vizcaino en la primera división. Me da igual el nombre del club y su ubicación. Ese club podría tener extranjeros y podría regirse por los patrones que tienen el resto de clubs de la liga española.
Posiblemente, esto beneficie al Athletic pues podría ceder y apoyar con jugadores.
En Bizkaia hay capacidad empresarial e interés futbolístico para dos equipos en primera.

INICIO TEMPORADA 2009/2010

Empezamos la temporada con el alivio de superar el primer partido en casa por la mínima contra el Español. Así dicho, parecería que perder el primer partido condiciona la evolución del resto del año y no es así, pero, sí hace que el entorno tenga una actitud frente al equipo y sobre todo, frente al entrenador.
Este fin de semana, Caparrós ya se despachaba en El Correo Español diciendo que tenía ofertas del extranjero que ha rechazado por el compromiso que le une al Athletic. También ha dicho que asume que Irureta haya sido fichado para cumplir las funciones que actualmente tiene asignadas y para poder realizar las funciones de entrenador, si ello fuera necesario. Nos ha asegurado que tres años de entrenador en nuestro Club queman mucho.
En fin, le deseamos que tenga mucha suerte, que se despide con éxitos y honores al final de campaña y que deje mimbres para que el que venga en el futuro pueda trabajar a gusto.